No perdamos el papel

13 Mar

Sí, vale. Las nuevas tecnologías vienen fuerte: móviles que son ordenadores, tablets que son televisiones portátiles y en general una sensación de que avanzamos a un mundo virtual muy, pero que muy real.

Sin querer negar las evidentes ventajas del progreso, reivindico el placer del puño y letra, de los tiempos lentos y el olor y la caricia del papel. Soy de los que disfrutan al peso de libros, por ejemplo me encantan los quintales de letras de Juego de Tronos. También me encanta abrir cartas que no sean facturas o publicidad de home english.

El papel, utilizado de forma respetuosa del medio ambiente, es un bien básico al que no podemos renunciar… Y si piensas que no es así, echa un vistazo a este vídeo:

Ilustrativo, ¿verdad? Hay veces que hay que reconectar con lo más clásico, el progreso no puede ser renunciar a una parte de nosotros mismos. Para mí el papel es más que una hoja, es un símbolo que comunica mucho y espero que me acompañe hasta mi esquela (mítica sección).

Y ya que estoy, si compartes el gusto por lo hecho a mano y con cariño que se refleja de alguno de sus usos y variadas formas, aquí tienes un proyecto que han montado una amigas con las que colaboro:

http://www.reparandoalasrotas.com/productos/

Son coach y expertas en inteligencia emocional, con un punto muy artista, entre otras cosas. El papel del coaching es tan variado como las personas. Para ellas, perfectamente puede ser regalar algo especial de una forma diferente, la alegría de sentir y expresar el cariño de alguien que cuide de ti… apoyar para estar mejor, a modo simpático y juguetón.

¡Mucha suerte y que ese avioncito de papel vuele hasta muy lejos alegrando compañías!

Y a ti, ¿te gusta el papel? ¿qué simboliza?

4 respuestas to “No perdamos el papel”

  1. Walker marzo 13, 2013 a 20:01 #

    Hola! La verdad es que para mí la pérdida del papel es un símbolo que me hace pensar en el cambio tan radical que estamos viviendo hoy en día. Los valores que nos habían inculcado nuestros padres y que, a su vez, a ellos se los habían inculcado sus padres se están perdiendo o sustituyendo, por no ser tan radicales. Habrá cambios que apoyemos y otros que no, pero de lo que sí estoy seguro es de la sensación que recibo de la Sociedad es de «lo quiero todo y lo quiero ahora»,aunque muchas veces ocurra que nada más conseguirlo ya queramos otra cosa.

    • Diego Caminero marzo 14, 2013 a 19:06 #

      Sí, a veces uno tiene la sensación de satisfacer necesidades que no son nuestras. Es como la canción de Queen, pero sin gracia… Lo bueno es que, dentro de nuestros límites, tenemos más poder del creemos!

  2. Benjamín Recacha marzo 13, 2013 a 23:38 #

    La verdad es que si echamos un vistazo a nuestro entorno se podría decir no que estamos perdiendo el papel, sino los papeles, y a pasos agigantados. Después de esta ocurrente introducción, debo decir que en mi vida diaria el papel ha ido cediendo su lugar a las nuevas tecnologías en algunos ámbitos, como es el caso de la prensa, que consulto íntegramente por internet, o a la hora de escribir, aunque en este caso no del todo. Aunque la mayor parte de lo que escribo lo hago directamente en el ordenador a veces me gusta ponerme a garabatear en la libreta, y es que no siempre las (presuntamente) buenas ideas vienen cuando estás delante de la pantallita, así que acostumbro a llevar encima una ‘libreta de emergencia’. Además, si me apetece escribir a la sombra de un árbol, qué mejores compañeros que boli y papel, ¿verdad?

    A lo que no renunciaré jamás es al libro. Me he sentido plenamente identificado con el ejemplo de ‘Juego de tronos’. Ay, qué placer acarrear esos manejables tomos, a poder ser de tapa dura… ‘Los pilares de la tierra’, ‘El médico’ y sus secuelas, ‘El clan del oso cavernario’ y sucesivos, etc… Aunque acabes con los brazos molidos, pero, eso sí, haces unos bíceps que para qué quieres ir al gimnasio, je, je… Por cierto, muy bueno el vídeo. Un abrazo!

    • Diego Caminero marzo 14, 2013 a 19:14 #

      Pues sí, qué gusto esa libretita de emergencia que nos invita a buscar lugares con encanto. Añado incluso un bolígrafo especial y lo que significa poder tomarse uno el tiempo para escribir (y pensar, y sentir) sin mirar una pantalla.

      Comparto también los títulos que dices, qué gusto tener un buen libro con peso específico, historias bien contadas. A veces puedes ver a gente leyendo algún volumen gruso y dices, «vaya ese libro tiene que ser bueno».

      Y el vídeo, de lo más inspirador jaja. La buena publicidad tiene mucho punch ;) Un abrazo!

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